diciembre 21, 2011

PLAN AHORA


CARTA ABIERTA AL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA



El mes de Agosto del presente año, la Familia Militar chilena le envió a Su Excelencia y a la derecha política, una carta en la que expuso muy claramente el gravísimo problema que viven actualmente miles de ex uniformados, unos prisioneros, otros sometidos a proceso, y otros tantos perseguidos implacablemente por lo que en Chile llaman tribunales de “justicia”.

En dicho documento se expresó el fuerte malestar existente en la Familia Militar, principalmente con su persona, Excelencia, pues siendo candidato presidencial se comprometió a dar solución a esta grave situación, producto de la cual, habiendo transcurrido casi cuarenta años desde los hechos de que se trata y en flagrante violación del Estado de Derecho, se continúa persiguiendo a personas que no hicieron más que cumplir con una obligación constitucional, mientras que todos los terroristas y todos los verdaderos culpables de la violencia política en Chile gozan de libertad. La persecución injusta e ilegal en contra de los uniformados no sólo no ha terminado ni ha disminuido bajo su mandato, Su Excelencia, sino que se ha incrementado.

En nuestra carta anterior se le informó que los ex uniformados chilenos pondrían en marcha el “Plan Ahora”, el cual tendría por finalidad inducir al cumplimiento de las promesas que se nos hicieron, por la vía de la anulación masiva de los votos de concejales en los comicios del 2012.

Pues bien, podemos informarle que mientras US termina su segundo año de mandato, el Plan Ahora se ha transformado en una fuerte organización desplegada en todo Chile, a la que están adhiriendo no sólo los uniformados en retiro, sus familias y amigos, sino también una cantidad creciente de chilenos agradecidos de nuestro Gobierno, el Gobierno Militar. Y de persistir Su Excelencia en su actitud, esto es, de no cumplir su promesa de hacer que se nos apliquen las leyes vigentes, el 2013 nos veremos obligados a continuar con la ejecución del plan.

Tuvimos noticias acerca de que hace pocos días su Ministro de Defensa, el señor Allamand, se reunió con algunos señores Generales en retiro. En la reunión se tocaron temas de tipo gremial y, muy tangencialmente, el problema que verdaderamente nos apremia, el relacionado con los militares presos políticos.

Lo gremial es una simple obligación de su Gobierno, una promesa que ojalá hubiera cumplido antes. Pero respecto del otro tema, el de los militares prisioneros y perseguidos por causa de la venganza marxista, el Ministro se refirió solamente a posibles beneficios carcelarios. Sepa Su Excelencia que consideramos que ello es una soberana burla, pues esos beneficios están contemplados en la ley, de ellos gozan hasta los peores criminales, y otorgarlos es una obligación. Queremos ser muy francos con Su Excelencia: para nosotros esos beneficios representan una mísera migaja, algo totalmente inaceptable como solución. El Plan Ahora no se detendrá ni se modificará por migajas.

Le recordamos, Señor Presidente, que de mantenerse el actual estado de cosas, su sector político va directo a una contundente derrota electoral en octubre del 2012, algo que a ustedes les dolerá mucho pero a nosotros no, pues nosotros no somos políticos ni nos identificamos con una derecha desleal y carente de principios, sino que durante 20 años hemos votado por ustedes como mal menor. Un “electorado cautivo” puede dejar de ser tal cuando es traicionado. Perder, por miedo a la izquierda, los votos que siempre han tenido por seguros en una irresponsabilidad política. Tenga cuidado Presidente ¿o quiere ser recordado en nuestra historia como el segundo Kerenski chileno?

Su Gobierno ha sido para nosotros la peor arpía en el más que manoseado tema de los derechos humanos. Su régimen se ha hecho parte en innumerables procesos, ha iniciado nuevos, y su Ministro del Interior, el señor Hinzpeter, mantiene bajo su alero la misma veintena de abogados izquierdistas que dejó ahí la señora Bachelet para ejecutar el desquite de los derrotados de ayer, persiguiendo a los militares que salvaron a Chile de una tiranía marxista.

Señor Presidente: somos hombres de armas chilenos. Nosotros sí cumplimos nuestra palabra. Esta es nuestra segunda advertencia, si la desoye, aténgase a las consecuencias.




DIRECTIVA NACIONAL “PLAN AHORA”