agosto 31, 2005




Las imágenes son fuertes, crudas, en su realidad de la guerra cruenta y cruel de las primeras oleadas de desembarco de los Marines en Tarawa en la madrugada del 20 de noviembre de 1943. Están recibiendo fuego y están ya teniendo bajas sin haber aún desembarcado.

Yo aún no desembarco en mis primeras vivencias del fuego que Mi Guerra presenció y estoy teniendo fuego del "enemigo", y espero para el bien del objetivo de este blog, "sin bajas". Me refiero a que he sido amenazado y cohersionado a no continuar escribiendo.
Pero así como esos Marines no me detendré hasta vencer al enemigo y conquistar el objetivo, sin importar las bajas que tendré.

Por ahora me reservo los nombres de quienes me amenazaron pero de continuar, en estas páginas lo sabrán, asimismo los Tribunales de Justicia por habérseme amenzado en mi libre derecho contemplado en las Garantías Constitucionales, artículo 19 Nº 12 que dice: "La Constitución asegura a todas las personas: la libertad de emitir opinión y la de informar, sin censura previa, en cualquier forma y por cualquier medio....".
De ocurrirme "algo" a mi persona, no se preocupen por la información que aquí trato de consignar ya que de pasar "eso", aparecerá un libro que no he publicado llamado "Agosto 25" que se encuentra a buen resguardo en Canadá.

Me saldré un poco hoy de la continuidad histórica de mi relato por noticias aparecidas estos días. Murió el General (r) Carlos Forestier, suegro del General Cheyre.
Este General era apreciado en el Ejército por sus cualidades de mando, su postura y el hecho de haber "creado" la gorra tipo "MF" (modelo Forestier) que seguía el estilo del Ejército alemán de la Segunda Guerra Mundial.

Recuerdo que siendo cadete de la Escuela Militar en julio de 1979, nos encontrábamos en un ejercicio de combate en el norte de Chile y apareció nuestro General Forestier quien era por esa fecha ViceComandante en Jefe del Ejército. Y yo tenía por misión hacer explosar desde una buena distancia más de 40 kilos de explosivo en el desierto. Todos los que estábamos en mi posición teníamos los implementos de seguridad del caso, como cascos y gafas más el hecho de estar dentro de una "trinchera".
Y ahí llegó Forestier con uniforme de campaña pero con su famosa gorra, y al acercarse me ordena detonar la carga distante a unos cien metros en el desierto; se le dijo que se cubriera y pusiera casco pero no lo hizo. Cumplí mi orden y la explosión (que fué enorme para un cadete como yo de 16 años de edad) me lanzó hacia atrás y cayeron muchísimas piedras sobre nuestra posición, pero nuestro General ni se inmutó y me preguntó mi nombre diciéndole "cadete Manuel Contreras mi General"; me miró y me dijo "¿eres hijo del Mamo? y le respodí que sí; me dijo "igual a tu padre" riéndose por la forma en que había detonado la carga.

Ese mismo año (1979) mi padre se encontraba detenido en el Hospital Militar por el Caso de Extradición y yo cada salida que tenía de la Escuela Militar lo visitaba un rato, ya que siempre estaba ocupado; en una oportunidad me mostró una de las cientos de tarjetas que recibía (así como un "libro de visitas" que llevaba con el registro completo de las personas que lo visitaron, fecha y hora, y como ejemplo de los muchos puedo dar fe del hoy diputado Maximiano Errázuriz ya que lo ví y mi padre me lo presentó; éste años más tarde sería mi profesor adjunto de la cátedra de Derecho Romano en la Universidad Gabriela Mistral y se casaría con la hermana de una compañera de curso cuyo padre era de Requínoa y había sido alumno en su niñez de la tía de mi padre) y dentro de estas tarjetas había una del General Forestier con elogiosas palabras y terminaba "¡Gracias Amigo!" (de puño y letra, con el logo correspondiente a su alta investidura).

Nunca entendí ni pregunté que significado tenía ese agradecimiento hecho por Forestier a mi padre.


Al ver ayer 29 de agosto en la capilla de la Iglesia castrense a la señora Lucía Hiriart y a Carlos Cardoen en la misa de este General fallecido tuve dos recuerdos:

El primero es el hecho que el General Pinochet no quizo saber nunca más de Cardoen (a pesar que Carlos Cardoen cooperó muchísimo con armamento para las FFAA en la década del '70 debido a los embargos internacionales contra Chile) desde mediados de los '80 haciéndole un desaire en una Feria en que no entró a su "stand"; algo sabía Pinochet ya que Cardoen estaba cooperando con dineros para la oposición de la época y luego fué una gran mentor de Ricardo Lagos a quien le prestó su helicóptero para la campaña presidencial de este, y eso que Cardoen es un fugitivo para la justicia de EEUU.

El segundo se refiere a que Forestier trabajó muchos años con Cardoen y me acuerdo que en 1981 (finales) yo recién estaba trabajando para mi padre en la empresa de seguridad "Alfa-Omega" ubicada en la calle Santa Lucía de Santiago centro, un día aparece Cardoen y nos invita en la noche a una de sus fábricas ubicadas en Macul.
Mi padre se fué en el auto de Cardoen (un Mercedes Pagoda) y nosotros lo seguimos en el BWB.

Al llegar entramos a un salón en el que se encontraban unas personas que hablaban árabe (había un intérprete) y no se tomaron los tragos que un mozo servía. Luego se apagaron las luces y se reflectó una película sobre las actividades (material de guerra fabricado) de "Empresas Cardoen" y recuerdo que comenzaba con "Quienes somos..".

Finalizada esta reunión, los extranjeros se retiraron y Cardoen le propone a mi padre que trabaje con él. Mi padre le dice que ya salió del Ejército y ahora no desea "tener más jefes"; luego Cardoen se dirige a mí y me ofrece lo mismo diciéndome que está haciendo unas fábricas en España e Irak; pero también me negué (agradeciéndole el gesto) ya que tenía pensado estudiar derecho el próximo año.
Nunca más lo ví; al menos yo.

Por los años '90 me encontraba con mi padre en el campo de Fresia (El Viejo Roble) y fuimos a Puerto Varas una noche a cenar a un restaurante de un amigo, y ahí se encontraba uno de los hijos de Cardoen que recién se había casado. Se sentó junto a nosotros y al pasar la noche y los tragos, este joven le pidió a mi padre que le escribiera unas palabra a modo de "autógrafo" en una servilleta para él, cosa que mi padre hizo.

En 1997 conocí a una persona (ex oficial de Carabineros) que había trabajado en la seguridad de la familia de Cardoen y me dijo que "esa servilleta con las palabras de mi padre para el hijo de su Jefe" las había visto enmarcada y colgada en la pared de la oficina de este joven.


Curiosidades de la vida....!

Nos vemos si nada ocurre con los "amenazadores". Estoy temblando de miedo (ja ja ja).

agosto 28, 2005




Esta foto fue tomada desde un avión en el momento preciso que se acercan las primeras lanchas de desembarco a las playas de la isla de Betio en el atolón de Tarawa, como así se denominó la batalla que ahí ocurrió.

La de arriba a la derecha es el instante que estas unidades de desembarco reciben fuego de artillería y ametralladoras desde la isla, comenzando el sangriento combate.


Este atolón se encuentra a unos 12.000 kilómetros de Chile y sus coordenadas son 1º 30' de latitud norte y 173º 0' de longitud oeste.
Pertenece a las Islas Gilbert (hoy es República independiente) en un lugar muy solitario del Pacífico Sur, como le llamaban los Marines.

Volviendo a la historia personal, mi padre egresó de oficial de Ejército a finales de 1947 como Alférez del Arma de Zapadores (hoy denominados Ingenieros de Combate) con la tercera antigüedad de su promoción. La primera la obtuvo Enrique Valdés Puga y la segunda Miguel Otero Latrhop.

Éstos eran hijos de prominentes políticos de la época, mientras mi padre sólo era hijo de un simple Coronel. Valdés llegaría a General de División y fué gran amigo de mi padre toda su vida, en cambio Otero se retiró al mes de egresar ya que no le gustó su destinación a la ciudad de Calama; pero es abogado y ex senador de Renovación Nacional. Me dió risa ver una entrevista suya en la cual afirmaba que su retiro del Ejército se debió a "una lesión sufrida en la rodilla, lo que le impedía cumplir con su sueño de ser paracaidista".

¿Cuál es el motivo de la risa? En 1948, Chile tenía un Ejército que no tenía cascos para cubrir las cabezas de sus soldados, usaban fusiles de 1898 y en su mayoría estaba compuesto por equipos de caballería para el transporte ya que apenas existían vehículos.

La sub-especialidad de Paracaidista llegó al Ejército en abril de 1965, traída por oficiales chilenos que se habían entrenado en Fort Bragg, quienes a su vez fundaron la Escuela de Paracaidistas Y Fuerzas Especiales. Podrán sacar sus propias conclusiones de las palabras del ex senador.

La vida militar de mi padre fue normal, siendo sus destinaciones el Regimiento de Quillota (1948-1951), como Teniente Instructor en la Escuela Militar (1952-1954), y a la Escuela de Ingenieros Militares (1955-1959) que había llegado a Tejas Verdes, en San Antonio (antes estuvo en Santiago y luego Melipilla). Ahí haría el correspondiente curso para ascender al grado de Capitán, obteniendo el primer puesto.

En 1960 ingresa como alumno a la Academia de Guerra del Ejército, egresando como oficial de Estado Mayor en diciembre de 1962 con el primer puesto de su promoción. Sería destinado como Secretario de Estudios y Profesor en la misma Academia hasta 1966, luego a Tejas Verdes como Comandante de Batallón y de ahí a Fort Belvoir en EEUU.

Volvimos en septiembre de 1967 luego de una travesía por mar desde el puerto de Nueva York hasta Valparaíso en el barco "Santa Bárbara"; estuvimos en Tejas Verdes hasta 1968 y mi padre en el cargo de Secretario de Estudios de la Escuela de Ingenieros.

Entre 1969 a 1971 vivimos en Santiago en la población militar de Pocuro en unos edificios que tienen la Plaza Inés de Suárez entre medio; fue una estadía magnífica ya que tengo muy buenos recuerdos de esa niñez junto a cientos de otros niños también hijos de militares; todos estos actuarían de una u otra forma en el 11 de septiembre.

Mi padre fue esos tres años Profesor de las cátedras de Inteligencia Militar y Estrategia e Historia en la Academia de Guerra. Contó que en una oportunidad el Presidente Allende visitó la Academia y a él le tocó recibirlo; Allende se tardó en llegar y cuando entró al primer despacho donde lo esperaban mi padre y el Director de la Academia les dijo "antes de darles la mano quisiera pasar al baño a lavarme las manos ya que vengo de una concentración y vengo con olor a roto"..., todos los militares presentes se quedaron en silencio y mirándose por las palabras de un Presidente que se autoinfería el hecho de ser el "Presidente del pueblo".

Paso el momento de compartir con todos los presentes, y Allende no se sirvió el tradicional "pisco" que le sirvieron, he hizo llamar a su chofer quien le trajo desde su auto suficiente "Chivas" (whisky) para todos.

Una noche de 1971, llegó a nuestro departamento el Coronel Herman Brady, quien había sido llamado a retiro del Ejército y le pidió a mi padre que lo ayudara a hacer la "apelación" ante la Junta de Generales, lo que por supuesto hizo ya que eran grandes amigos. Pasaría este problema, y Allende lo ascendió al grado de General porque le dijeron que "era un militar allendista".

El hijo de Brady trabaja hoy para la empresa "BlackWater" cuyo servicio es la contratación de ex miembros de las FFAA para servir como guardias en Irak y otros lugares peligrosos, cuyo dueño es un ex oficial de Ejército que se hizo posteriormente Infante de Marina norteamericano, luego se retiró también y volvió por un tiempo a Chile e hizo un curso en la ANEPE (Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos) siendo compañero de Michelle Bachelet, compitiendo con ella el primer puesto, pero lo obtuvo "una mujer", ya que así se había dispuesto y su premio fué realizar otro curso (pero gratis, como una beca) en EEUU de similares características.

Y a Pizarro le negaron su mérito, por lo que volvió a EEUU, hizo varias empresas y lo vimos como analista militar en la CNN durante la guerra de liberación de Irak.

Me fuí del tema...., estamos llegando a 1972. Pronto saldremos de Santiago nuevamente y conoceré al general Pinochet.

Se acerca el 11.

agosto 27, 2005






Esta foto es un convoy de navíos con tropas de Marines norteamericanos durante la Segunda Guerra Mundial, que van al asalto de la isla de Tarawa, Pacífico Sur, al norte de Nueva Zelanda y al Este de Australia (en la línea del ecuador) en noviembre de 1943.

No saben a lo que van ni lo que enfrentarán. La batalla se llevó a cabo en la isla de Betio dentro del atolón de Tarawa (Islas Gilbert) en 76 horas entre el 20 y el 23 de ese mes. Casi mil Marines murieron y más de dos mil quinientos fueron heridos; por su parte los japoneses tuvieron más de cuatro mil muertos, poquísimos heridos (casi todos coreanos) ya que no se rindieron dándo sus vidas por el Emperador del Sol Naciente.

Un poco como ese convoy me siento yo al leer los comentarios, mails, llamados teléfonicos, etc. que he recibido luego que se publicara en el diario "Las Últimas Noticias" del jueves 25 de agosto de la existencia de este Blog y su"contenido".

La verdad es que esperaba menos tensión por esta creación, que no tiene (al menos de mi parte) mayor ambición que ser un diario de vida; pero se ha especulado y debo aclarar varias cosas.

En primer lugar, agradezco los comentarios que me han enviado personas que no conozco; algunos que me llamaron la atención fueron de jóvenes chilenos que se interesan un poco más por la historia de su país; otros dándome apoyo para "liquidar" a personas; también uno de ellos que escribe con seudónimo "alentándome" para "delatar" a supuestos autores de "supuestos crímenes" (cuando fueron todos accidentes o causas naturales), y otros que me han criticado por mi mala redacción y ortografía.

Pero el que me ha dado risa es el de un seudo intelectualoide que debe ser dueño de la verdad y realmente no le entendí nada, salvo sus rimbombantes apellidos vinosos.

En segundo lugar, debo insistir cuál es el propósito de estos escritos: para aquel que me criticó la mala redacción le digo NO SOY ESCRITOR, asi es que por favor me perdone este defecto; a aquellos que desean deleitarse con "soplonajes" pueden cambiar de canal ya que no será este un espacio para acusar de crimen alguno a NADIE ni menos "detallar" sucesos de los cuales desconozco, pero eso no amerita que pueda DAR OPINIÓN; por último para aquellos que quieren aprender de unas líneas la experiencia de quien tuvo una privilegiada (para bien o para mal) posición histórica de acontecimientos que aún están vivos ESTE SERÁ SU ESPACIO.

Mi propósito final es dar a conocer TODO LO QUE VÍ y de lo cual puedo dar fé; mi propósito medio es dar opinión de aspectos relevantes de la vida nacional con sus personajes y lo que yo pienso y sé de ellos; y el propósito inmediato sólo es escribir lo que dicten mis recuerdos, mi mente y mi corazón.

Es un "combate de los mil combates que formaron la Batalla por Chile" desde mi perspectiva y cuyas repercuciones las vivo a diario.

Quisiera que aquellos que me critican burlonamente no dando sus caras ni nombres verdaderos se pusieran sólo un día en mis pantalones...sólo un día, y después critíquenme.
Es posible que para muchos hable y escriba tonteras, estupideces y locuras pero SON MÍAS; YO LAS VIVÍ y las sufrí. Y es precisamente lo que me tocó vivir que no se lo doy ni a mi peor enemigo.

Creo en Dios por sobre toda las cosas; creo en los valores que nos dieron los Padres de la Patria y todos aquellos y aquellas que han contribuído a hacer de Chile un mejor lugar para vivir; creo en la Verdad, la Bondad y la Belleza (les recomiendo "El Libro de Urantia") de las cosas; por eso cuando hoy veo que los que triunfan son los anti-valores, los que creen que existe "un tercer sexo", los que roban a destajo y sin embargo son Presidentes, Senadores, Diputados etc. elegidos por ¡Nosotros! realmente me revelo.

No entiendo que a la juventud se le insista en el materialismo, en el sexo como forma de vida, en la violencia como entretención y las drogas y el alcohol como diversión; es decir un mundo sin Dios. ¿Qué futuro tenemos?

Yo no soy un santo, ni jamás lo he sido ni lo pretendo, pero fué en mi adultez que me enfrenté a tentaciones (siempre dentro de mis valores por supuesto) que hoy las tiene un joven o una niña a los 13 o 14 años, y los padres no lo entienden y "nuestras autoridades" les regalan condones....!

Esto es parte de "Mi Guerra"; debemos luchar por lo que creemos, sin miedo a quedarnos solos o en el rídículo más grande. Prefiero la soledad de mi hogar junto a mis perros, la maravillosa vista al mar que vivir dentro de una sociedad consumista, materialista, sin valores y anti-valórica y que rehace la historia como les conviene.

No señores; yo también tengo algo que decir y en eso estoy, " gústele a quien le guste "; además sirve de terapia, de desahogo y limpieza mental y del corazón por los malos momentos vividos, para olvidar los recuerdos imborrables y las pesadillas frecuentes; sólo dormir bien.


"Vida nada te debo, vida estamos en paz"; éste sí que era un poeta; no una creación stalinista para obtener un Premio Nobel.


Asi es que podrán sentir ahora con mayor claridad cuál es el propósito de estas laaaargas líneas que vendrán, por lo que les recomiendo que se preparen ya que se sorprenderán de lo que leerán; eso está garantizado.

Sé que no le soy indiferente a nadie, me aman o me odian, asi es que los que creyeron que este Blog serviría para sus deshonestos vicios, se han equivocado y pueden cambiarse de canal.


Sigo en ese convoy rumbo a Tarawa....sin saber que ocurrirá ni a qué me enfrentaré; sólo sé que tengo por delante a un enemigo que vencer y un objetivo que conquistar.

Buenas tardes.

agosto 26, 2005



Saigón...., Vietnam otra vez!


Así comienza el film de "Apocalípsis Now"; pero prefiero "El Francotirador" con Robert De Niro.

En 1966 mi padre fué destinado por el Ejército de Chile a Fort Belvoir en EEUU, Virginia, en Washington D.C.

Vivimos en Bellheiven Towers, un condominio para militares de esa época, cerca de la capital norteamericana.
Su destino era un Curso para Oficiales en cuanto a la denominada " Seguridad Nacional" como sistema para toda Latinoamérica.

Fueron muchos oficiales del Ejército de Chile que estuvieron en EEUU, tanto en Fort Beninng, Fort Bragg y Fort GulliK (Panamá).

El objetivo de EEUU en ese tiempo era entrenar a la Fuerzas Armadas de los países de America del Sur en su "guerra fría"...

Unión Soviética tenía el control de Cuba y deseaba que Sudamérica se convirtiera "en mil Vietnam", tal como lo quería el "Ché "Guevara.

Ernesto Guevara (el "Che") había sido el mayor ejecutor de las misiones que Fidel Castro le había ordenado para la guerra de guerrillas en África; que fracasaron.

Sólo le quedaba América del Sur.

El "Ché" se vino a Bolivia en 1967, he intentó llevar a cabo la órden de Fidel, pero los norteamericanos le llevaron por adelantado su misión y terminó muerto ; o mejor dicho asesinado ya que se entregó vivo y fué ejecutado.

Ante tal situacion, el Mando Central de las Fuerzas Norteamericanas para el Cono Sur, dispuso un entrenamiento global para todas las FFAA de América del Sur en el contexto de
una "Guerra Fría", para lo cual se tomó como ejemplo lo que estaba ocurriendo en Vietnam.

Entre 1964 a 1971 se entrenaron Oficiales de las FFAA de toda Sud América en la doctrina de la "Seguridad Nacional" para combatir a lo que en esa época se denominaba "el enemigo comunista global".

Esas técnicas de combate incluían tanto la destrucción de la guerrilla urbana y rural como los sistemas de interrogatorio, que eran copia fiel de los utilizados en Vietnam.

Durante los gobiernos de Alessandri, Frei y Allende nuestros miembros de la FFAA se adoctrinaron en esas técnicasde guerra irregular.

Cuando vivimos en EEUU, entre 1966-1967 tuve un amigo que se llamaba "Billy", cuyo padre fué destinado a San Diego ese año pero su destino sería servir en Vietnam. Era Infante de Marina y jamás volvió. Murió en combate en Da Nang en 1968.

En el Curso de mi padre en Fort Belvoir la mayor parte de los oficiales que ya habían estado en Vietnam querían volver por el hecho que les pagaban la totalidad de su sueldo.

Al momento de volver nosotros a Chile, casi todos los oficiales norteamericanos compañeros de mi padre volvieron a Vietnam en septiembre de 1967.

El 31 de enero de 1968 ocurrió la "Ofensiva del Tet" por parte de fuerzas irregulares y regulares comunistas de Vietnam del Norte en contra de todo el sur; hubo miles de muertos, incluyendo a casi todos los compañeros de mi padre de Fort Belvoir (los que están escritos en la pared de marmol en Washington D.C.) ; fué una ofensiva que no tuvo un éxito militar para los comunistas del norte pero sí un éxito sicológico para toda la guerra que vendría después.

Este hecho militar tendría un efecto tremendo en mi padre, y sobre todo en su actuación posterior en Chile del cual Pinochet le pediría informes y análisis de lo que podría ocurrir en nuestra Patria.

Estamos en 1969 , siendo mi padre Profesor de Estrategia e Inteligencia de la Academia de Guerra del Ejército.

Augusto Pinochet ya era General de Brigada y se encontraba en el Norte de Chile...., pero solicitaba los informes y análisis por parte de mi padre de una posible guerra irregular ya que se estaban dando las mismas condiciones de Vietnam.

Continuará.

agosto 25, 2005




Agosto 25...hoy cumplo 43 años de edad.

Siento haber vivido y sufrido el doble. La imagen es de un veterano de la guerra de Vietnam "abrazando" los nombres de sus camaradas muertos en combate en el monumento en que se escribieron los casi sesenta mil soldados norteamericanos muertos en esa cruenta e injustificada lucha.

Vietnam es una de las guerras que más ha influído en mi historia personal desde el punto de vista como yo interpreto la historia de Chile los últimos 40 años. Volveremos a esa interpretación en el próximo capítulo cuando esté más frío, más mente que corazón.

¿Porqué la imagen?

Porque me interpreta en varios sentidos pero hoy lo escribiré desde el corazón. Y algo más como anécdota.

También siento esa pena de la foto por pérdidas de personas que se han ido de mi vida, ya sea amigos muertos por acción de la guerrilla urbana en nuestra Nación, accidentes y pérdidas emocionales. Sí, pérdidas emocionales que se entremezclan con mi historia y en algo con la historia de Chile.

Jamás he podido tener relaciones estables y duraderas con las muchas mujeres que se han cruzado en mi vida. Sigo soltero y sin hijos. Nunca pude formar una familia...y no estoy claro si es por los traumas que me dejó todo lo que he debido pasar o por problemas familiares que me afectaron como el menor de mi familia.

El tiempo lo dirá.

Hace exactamente diez años, en 1995, mi padre se encontraba internado bajo detención en el Hospital Naval de Talcahuano. Fuí a verlo desde Santiago cuando ya lo habían operado de su nueva colostomía, y la Armada me había entregado una tarjeta de identificación para ingresar a la Base Naval y alojarme en el Hotel de ésta.

Llegué más menos a la medianoche del 24 para el 25 de agosto ya que quería celebrar mi cumpleaños 33 junto a mi padre antes de que se lo llevaran a Punta Peuco. Me instalé en el Hotel y me dirigí al Hospital y estuve con él una hora hasta que llegaron "órdenes terminantes" que debía abandonar de inmediato la pieza en que se encontraba mi padre. Apareció un médico que de mala gana venía a dar el cumplimiento de la orden. Mi padre en su lecho de enfermo se indignó y le dijo al médico-marino que a un Almirante lo hubieran tratado mejor en el Hospital Militar. Pero yo al ver que le estaba subiendo la presión lo calmé y me retiré.

Al día siguiente muy temprano por la mañana me golpean la puerta de la pieza del Hotel y yo sin abrirla pregunté quién era y qué deseaba, y con voz de prepotente se identificó como un Capitán de Fragata (no recuerdo su nombre, ya que este blog no esconderá ninguno) que tenía "órdenes" de su Comandante de Navío de apellido Manzano de que yo me presentara de inmediato.

Casi lo mandé a la cresta y le dije que esperara a que me duchara, vistiera, tomara desayuno y que su Comandante esperara "mi visita".

Concurrí a la oficina de este Comandante (era el segundo de la Base y hoy es Vicealmirante) y muy atento me dijo que yo "había provocado problemas anoche por mi ingreso a horas no permitidas al Hospital". Lo miré y le expliqué que había viajado desde Santiago para estar junto a mi padre el día de mi cumpleaños, y que la Tarjeta de Identificación que se me había otorgado decía "Todo Horario". Se quedaron mudos y desechos en explicaciones. Me levanté y escucho por una radio interna que se encuentra en la habitación de mi padre el General de Ejército Comandante de la III División.

Estos marinos se quedaron mudos, y Manzano "amablemente" me pidió de vuelta la Tarjeta, lo que no hice (aún la tengo) y no le quedó otra que llevarme al Hospital, además de "putearse" en privado al prepotente del Capitán de Fragata que había armado él el escándalo.

Llegamos a la habitación y todo era sonrisas; se terminó el "incidente". Se fueron los uniformados y llegó a visitar a mi padre un diputado de la UDI el Sr. Ulloa, quien mantuvo estrechas relaciones con mi padre hasta enero de este año 2005. Hoy no contesta ni el teléfono.

Días antes de este hecho había recalado la Escuadra en Talcahuano y la mitad de los oficiales y muchos suboficiales fueron a ver a mi padre y le pidieron que les firmara tarjetas, quien lo hizo gustoso (la otra mitad no podía bajar). Cuando yo estuve volvió la Escuadra y la "otra mitad" de oficiales y suboficiales que restaban de esta Fuerza quisieron ir a ver a mi padre pero el Comandante Manzano se los prohibió por órdenes de su Almirante Balleresque (el mismo que dió por muerto a Merino en una ceremonia cuando aún estaba vivo, y que le costó la baja).

En fin...mi tema era lo emocional.

Días más tarde en Santiago (12 de septiembre) conocí por casualidad, gracias a unos amigos a una mujer estupenda, separada con hijas (siempre he tenido debilidad por mujeres separadas o casadas y un poco mayores que yo...¿será por no querer compromisos?) y me impresionó su fortaleza y tesón (además de su belleza: era alta, cuerpo atlético ya que había sido seleccionada nacional) porque viniendo de buena familia le había tocado la pobreza desde muy niña en San Bernardo junto a siete hermanos y una madre que como pudo los educó a todos.

Es Ingeniero Comercial de la Universidad de Santiago, MBA de la Adolfo Ibañez y trabajaba como Gerente de Marketing de una empresa de telecomunicaciones.

Me enamoré de inmediato y nuestro intenso romance comenzo un 24 de septiembre, apenas 12 días de conocernos. Fué de todo, buenos y malos momentos; teníamos el carácter y genio muy parecido pero nos llevábamos bien, salvo por....mi falta de trabajo estable, no tener bienes inmuebles ni cuenta bancaria ni menos ahorros.

¿Su debilidad? El materialismo; quizá debido a subir de la pobreza a una buena posición económica sin aprender muchos valores; sin embargo era correctísima, trabajadora y de un humor único, aunque algo ingenua.

Además con un ex marido que lloraba todos los días a sus familiares pidiendo que ella volviera y que le entregaría "el mundo".

Pero pasó el tiempo y R. no pescaba y seguíamos bien pero ella seguía con sus dudas por mi futuro ya que tenía dos hijas que mantener. Para colmo se enferma de un principio de cáncer del cuello uterino y la operan. Todo salió bien, salvo algo....

Quedó embarazada.

Jamás me habían dicho algo igual. Quedé helado, pero de felicidad. En cambio no su cara y me explicaba que no lo podía tener ya que no sabría "cómo explicarle a sus niñitas, perdería el trabajo...etc". Como la amaba accedí al aborto.

Pero pasaron los días y comprendí que ella no amaba la vida como yo y fue la última pelea: le dije que era capaz de matar de un tiro en la cabeza y de frente a un delincuente o con mis propias manos pero jamás a un hijo que venía en camino.

Hasta ahí quedamos.

Pasaron los días, y en un encuentro en Casa de Piedra estaba ella y me saludó y su hermano me dijo al final de la reunión de visita de un General norteamericano que R. tendría el hijo.
Pero seguíamos separados y ella seguía yendo a ver a mi padre a Punta Peuco con su embarazo de dos meses y en uno de esos viajes perdió la guagua. Nadie me quería contar.

El médico me dijo que por la enfermedad que había tenido se producían abortos espontáneos.

Nunca sabré la verdad...pero mi pena fue indescriptible. Jamás la volví a ver; ella regresó con su marido el cual le compró casa en La Dehesa...¡eso es lo que valgo! Para reirse, ¿no?

Quiso mucho a mi padre (ya que el de ella la abandonó siendo niña) y creo que también algo a mí. Con el tiempo la he entendido. Yo no era más que un idealista sin trabajo estable que había arriesgado mi vida muchas veces y no aterrizaba que la vida normal tiene otro norte. Tuvo razón en cambiarme por motivos económicos...aunque yo nunca lo habría hecho.

Ha sido la mujer que más he amado en mi vida y creo que aún estoy enamorado de ella y por eso hoy es mi pena de no tenerla junto a mi y ver su sonrisa, tener su olor en mi ropa y sentirla en lo que fue nuestro intenso amor,....oir su inteligencia y verla actuar en su fuerza de carácter y jamás rendirse por las dificultades...materiales. Era o es mi complemento.

Si lees esto R. te dedico la canción de Baglioni "Mille guiorni di te e di me".

Aún te amo, ya que contigo encontré la felicidad que nunca tuve y pude ver un mundo distinto, en paz, de familia, de vida...pero no tenía los medios materiales. Lo siento mucho y espero que seas feliz.

ANÉCDOTA: a mediados de octubre de 1995, un domingo, pasamos a la Rotisería de mi amigo Tito Martínez en San Carlos de Apoquindo en un centro comercial (R. vivía cerca) y me bajé a comprar unas cosas ya que íbamos a ver a mi padre a Punta Peuco; ella se quedó en el auto, compré y salí apurado, pero me crucé con un hombre de unos 45 años de anteojos y amable quien me quedó mirando.
Más tarde al volver, pasé de nuevo donde Tito y me contó que esa persona le había preguntado si yo "era el hijo del General Contreras", mi amigo lo afirmó y este personaje le dijo "dígale a su amigo Manuel que le envío saludos y todo mi apoyo a su padre injustamente condenado y encarcelado, de parte del Alcalde de Las Condes Joaquín Lavín" y que por favor nos presentara a penas se diera otra oportunidad.

¿Cómo nos cambia la vida o las ambiciones políticas Joaquín?


Ya, no los lateo más con las únicas penas que leerán de mí en este viaje con dirección norte y hacia el futuro.

Gracias por leerme y hasta pronto, que vienen más anécdotas y personajes que se verán tal como los ví; y les prometo que se impactarán y podrán mirar con otros ojos a la política chilena que no es más que un grupo de elitistas que en lo único que se diferencian es cómo engañan al pueblo, nos estrujan y viven muy...pero muy bien, tanto de izquierda como de derecha, por supuesto con honrosas excepciones por ambos lados.

Nos vemos.

agosto 22, 2005



La imagen superior representa la culminación de una de las batallas más sangrientas libradas por los EEUU durante la Segunda Guerra Mundial: Iwo Jima.

Es el izamiento patrio en el Monte Suribachi por Marines en febrero de 1945; pero no lograrían la ocupación y pacificación de la isla hasta el 16 de marzo luego de una carga banzai suicida por los últimos 300 soldados japoneses sobrevivientes, quienes prefirieron la muerte con honor, el camino del Samurai del Bushido que a la rendición.

Estos hechos no son tan lejanos para mí. Nuestra estadía en EEUU marcaría para siempre nuestras vidas y el futuro de Chile.

Llevo en mis venas la sangre de soldados. Mi bisabuelo paterno se llamaba Manuel Contreras Canelo quien nació en 1851 y participó como soldado del Regimiento "Esmeralda" 7° de Línea en la Guerra del Pacífico de 1879-1884.

Combatió en las batallas de Tacna, Chorrillos, Miraflores, ocupación de Lima y Campaña de La Sierra. Volvió a Chile en 1884 con los "Batallones Olvidados" siendo licenciado del Ejército en diciembre de ese año. Fue condecorado con dos Medallas de Plata y tres barras del mismo metal.

Volvería a ser movilizado y ver acción de combate en la Guerra Civil de 1891.

Como parte del Ejército de Línea sólo le quedó obedecer y defender la posición del Presidente Balmaceda. Entró en combate contra muchos de sus antiguos camaradas que se habían unido al bando contrario que había organizado otro Ejército en el norte de Chile, principalmente con veteranos de la Guerra del Pacífico y mejor armamento.

Se encontró en las sangrientas batallas de Con-Cón y Placilla y en esta última fué gravemente herido, y fué salvado por un ex camarada del otro bando que al reconocerlo tendido en el campo de batalla lo subió al "carretón de los muertos" ya que todos los heridos sin excepción alguna fueron rematados por bayoneta.

Llegó a Valparaíso y lograron salvarle la vida pero perdió una de sus piernas. Al terminar la Guerra Civil, jamás volvería a su Ejército y además sin trabajo estable. Pero siempre en sus trajes raídos por la pobreza llevaría sus medallas de la Guerra del Pacífico con orgullo; moriría en 1899 producto de las heridas recibidas en combate y con su pena de un pueblo mal agradecido.

Se casó con doña Clorinda Morales Moya en la ciudad de San Fernando en 1893 luego que el gobierno dictara tres leyes de amnistía (lo que hoy no se respeta para su nieto, mi padre, y todos los militares encarcelados y procesados por un justicia corrupta y prevaricadora) volviendo a una vida en paz, a pesar de su pobreza, y tuvo como hijos a Manuel (mi abuelo) y María.

Mi bisabuela al quedar viuda y en la pobreza más paupérrima tuvo que lavar ropa y asear casas y haciendas en la ciudad de San Fernando y sola logró criar a sus dos pequeños hijos.
En 1914 llevó a su hijo Manuel a que ingresara a la Escuela Militar de Santiago y fué rechazado su solicitud debido a su pobreza pero cuando insistió que el padre de su hijo había combatido en la Guerra del Pacífico, fué aceptado de inmediato como cadete don Manuel Contreras Morales.

En 1924, después de 40 años de terminada la Guerra, el gobierno de Chile le otorgó una Pensión de Guerra a "la viuda del soldado Manuel Contreras Canelo quien hizo la Guerra contra Perú i Bolivia", como dice el Decreto correspondiente.

Por su parte, su hija María llegaría a ser Profesora Normalista, amiga y compañera de Gabriela Mistral (Lucila Godoy Alcayaga) y terminaría sus días como Directora de la Escuela "República de Israel" de Requínoa y cuando fué visitada por la Primera Ministra de Israel Golda Meyer se hicieron amigas y mantuvieron correspondencia hasta su muerte.

Mi abuelo Manuel llegaría al grado de Coronel de Ejército y le tocó vivir una de las etapas más tristes para el Ejército de Chile entre 1920 al 1940, en la cual los políticos de turno hicieron de esta institución una "paria" dentro de la sociedad chilena, además de no dar cumplimiento a la mantención de la seguridad externa e interna de la Nación, amén de rebajarle permanentemente sus sueldos y salarios lo que llevó a muchos oficiales a retirarse obligados y enrolarse como mercenarios por Bolivia y Paraguay en la Guerra del Chaco de 1934-1936.

Se casó en 1928 y quedaría viudo en 1936 con tres hijos de corta edad; sin embargo siguió adelante con el ejemplo de su madre quien falleció en 1944.
Sus hijos hombres, Manuel (mi padre) ingresaría a la Escuela Militar en 1944 a los 14 años de edad (llegaría al grado de General); su hijo Jorge a la Escuela Naval en 1947 (llegaría al grado de Contralmirante) y su hija Aída emigraría a Brasil donde tuvo 5 hijos.

El ingreso de mi padre don Manuel Contreras Sepúlveda a la Esuela Militar fué una casualidad. Antes que su madre falleciera (mi padre tenía seis años a esa fecha) esta había decidido el destino de la vida su hijo Manuel: sería Médico.
Pasados los años se mantenía este deseo póstumo, pero en el verano de 1944 mi abuelo quien era Comandante del Regimiento "Arauco" con sede en Osorno recibió por esos días una comitiva de oficiales de la Escuela Militar que viajaban por todas las ciudades tomando los exámenes de ingreso a los postulantes.

Una noche mi abuelo invitó a cenar a estos oficiales a su casa y le pidió a la "nana" que hiciera bajar al comedor a Manuelito, ya que uno de los tenientes presentes quería preguntarle "algo".
Mi padre se presentó y el teniente le pidió que ingresara a la Escuela Militar, y mi padre sin decir palabra alguna miró a su padre quien asintió con su cabeza. Mi padre aceptó y al día siguiente le tomaron los exámenes de rigor, siendo aceptado.

Ese teniente era Juan Cheyre, quien luego sería su primer Comandante de Compañía y al cual tanto mi abuelo como mi padre le tuvieron gran estima.

Pero años más tarde ya estando en retiro como General (r) fué Director de Investigaciones en el gobierno de Frei Montalva y de Salvador Allende, para luego ser enviado como Embajador de Chile en Portugal del gobierno marxista.

Era el padre del actual Comandante en Jefe del Ejército don Juan Emilio Cheyre.

¿Vueltas de la vida?

Sin duda...hasta mañana.

agosto 21, 2005




Soy Manuel Contreras Valdebenito; Egresado de Derecho, nacido en Santiago un 25 de Agosto de 1962.

Tuve la gracia o la desgracia de nacer en Chile y ser hijo de una familia estigmatizada por el cargo que ocupó mi padre en el Gobierno Militar entre 1973-1990, ocupándole a él la Dirección de Inteligencia Nacional entre 1973-1977.

Pero mi objetivo no es escribir de él ni de mi familia; sino de la historia de una parte de Chile que me tocó vivir; la que vivo hoy día, cada día, con sus aconteceres que puedan importar a quienes deseen conocer lo que me ha tocado vivir, a los personajes que he conocido y las grandezas y bajezas de éstos.

Además deseo recibir no comentarios, sino historias reales de aquellos que vivieron los combates y enfrentamientos entre el 11 de septiembre de 1973 y 1990 por ambos bandos enfrentados, para realizar una tarea objetiva de recopilación de hechos reales que se escriban como una parte de la historia de Chile, para bien o no pero jamás ocultarla ni tergiversarla.

Yo escribiré lo que fue "Mi Guerra" y que la sigo viviendo a diario como pocos en este país la estamos viviendo.

Sólo deseo contribuir a la verdad histórica de todos los que entraron en este conflicto que ya lleva más de 30 años; y desenmascarar a los que se han aprovechado de éste por ambas partes.

Toda la información que me puedan hacer llegar será para y hacia el futuro; cada lector sacará sus conclusiones personales. Nadie estará obligado a creer lo que aquí escribiré.

Están TODOS invitados a escribir junto a mí lo que a cada uno de ustedes les ocurrió con motivo de los cambios revolucionarios producidos de la década del '60 en adelante hasta el día de hoy, que es un tiempo dominado por las ambiciones económicas y no las idealistas de aquellos años en que demasiados entregaron sus jóvenes vidas y hoy son otros los que aprovechan esa primera sangre vertida.

Hasta mañana.